Oración del mediodía
Continúa tu día diciendo una oración al mediodía. Aquí encontrarás una extraordinaria para pedir la protección de Dios para ti y los tuyos.
La Biblia hace varias menciones sobre la hora del mediodía. Sin embargo, algunos pasajes son bastante significativos y merecen ser reflejados por la espiritualidad.
En este momento, que debería ser la hora de la comida, y después de la comida, el cansancio y las ganas de dormir laten, y es precisamente en este momento en el que deberíamos ser conscientes de detenernos, reflexionar, buscar un lugar silencioso.
Y, en este momento, entrar en contacto con nuestro Dios interior para continuar el día e intercambiar nuestra energía, pero desgraciadamente, el ajetreo de la vida cotidiana hace que el ser humano se olvide de conectarse.
Al igual que tú, todos los seres humanos son únicos, así que no nos cansemos de las mismas cosas, mucho menos al mismo tiempo.
Para estas situaciones, tienes la oración del mediodía para la reconciliación. Cuando te sientas muy apático y agotado, puedes recitarla.
Oración católica del mediodía
Señor Jesucristo, ahora me pongo en contacto contigo, mi santo, para llenarme con la luz de tu amor, y la energía positiva para continuar mi actividad y funciones diarias.
Que las bendiciones que vienen de las peticiones en mis oraciones me den la fuerza para continuar hasta el final de este día.
Fortalece mi fe en la vida, mi ángel, que la misericordia de María, amante y madre amada de su hijo, haga que mi motivación y voluntad de servir y trabajar sea inquebrantable.
En esta oración de mediodía, Padre, me entrego a la curación para que mi humor, virtudes y felicidad se fortalezcan.
Ayúdame en todo momento, el Espíritu Santo, en el camino hacia la reunión al final de este día.
¡Salve María! Amén.
Oración de mediodía para obtener energía
Querido Dios, sabes que siempre me he dedicado en cuerpo y alma a mi familia para que todo en casa pueda ir lo mejor posible. Sin embargo, no es fácil mantener el mejor espíritu y energía frente a tantas cosas por hacer.
Por eso me dirijo a ti, amado Padre Todopoderoso, para que me des el poder y la fuerza que necesito para enfrentar cada uno de mis desafíos diarios y para estar con mis seres queridos cuando tengan que enfrentarse a la historia y los caminos del otro.
Así como siempre te he pedido que los cuides de todo mal cuando no estoy cerca, te pido, Señor, que traigas tus bendiciones y energías sobre ellos.
Sólo en ti confío, y sé que me darás de todos los santos, la ayuda, la fuerza, la fe y los milagros necesarios para que no vuelva a suceder.
¡Amén!
¿Cuándo diré esta oración?
Cuando estés cansado o de mal humor, puedes decir esta oración.
Es una buena idea hacerlo una rutina y rezar todos los días al mediodía, especialmente cuando estás fatigado. Sin embargo, cualquiera puede adaptarse a sus necesidades específicas.
Es sólo cuestión de evaluar qué aspectos de la familia y de ti mismo quieres fortalecer y preparar.
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